Esconderse para ser el ganador
Cuando éramos niños, escondernos y ser el último
en ser encontrados era nuestro reto, ahora parece
que se nos ha olvidado lo divertido de jugar escondidillas.
Aún recuerdo cada reunión con mis primitos o los recesos en el Kinder, todo era jugar y el juego de costumbre, las escondidillas,nos la podíamos pasar horas y horas, al final, haciendo trampa poniendo a contar al más chiquito, hasta, que se cansaba y hacía su berrinche.
Pero, el juego no es solo esconderse, sino que lleva una serie de pasos, primero, zapatito blanco, zapatito azul y el que se quedaba contaba, luego para saber hasta que número, era la técnica de con dedito te pique, después el puño, rápidas o lentas, y al final todos a correr para escondernos y si alguien llegaba a la base nos salvava a todos.
Honestamente, recuerdo con mucha alegría esos momentos, en donde correr, escondernos,enojarnos con el otro porque estaba viendo mientras contaba o porque el chismosillo ya le dijo, eran momentos sanos en los que no nos damos cuenta de las preocupaciones; hoy no me parece tan lejano porque comparto con mis sobrinos todos los juegos que yo sé, pero me doy cuenta que ya no es lo mismo, en la actualidad los niños están muy invadidos por la televisión y la tecnología, tanto que prefieren cambiar un momento de diversión al aire libre por ver su telenovela de niños favoritos.
Extraño tener cuatro años...
POR:BRENDA MONDRAGÓN
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